9/23/2011

Instrucciones para disfrutar la embriaguez

Lo primero a elegir es la sustancia con la que usted habrá de embriagarse. Sea que prefiera su licor de costumbre, algún gas exótico o un sentimiento, procure enajenarse con sus efectos en soledad o en la compañía de seres de su completa confianza. De esta forma, si la embriaguez se torna en una ‘mala copa’ no lo resentirá tanto al día siguiente.
Si usted ha alcanzado esa edad en la que el cuerpo comienza a dar sus primeras quejas, le sugiero prevea e ingiera una ranitidina para evitar las típicas agruras propias de la borrachera, o en su defecto, si ha elegido embriagarse con un sentimiento, que tenga las precauciones necesarias para no arrepentirse de nada a la mañana siguiente (deje el número de la ex novia/o lejos del alcance de sus manos).
Sin embargo, para realmente entregarse al placer de la embriaguez, lo más recomendable es que haga caso omiso a lo que este texto indica, ya que se ha demostrado que para alcanzar los estados epifánicos, de profundización y escape, que suelen buscarse con la embriaguez, lo mejor es perder control absoluto sobre sus actos y vomitar, lo que sea necesario vomitar.