12/30/2010

El viaje del photobooth

El primero de enero del año pasado estrené computadora. Y como andaba también estrenando otras cosas (tiempo, trabajos, soltería, roommie, "departamento", pelo) me entró una onda de tomarme muchas fotos. El viaje era ver cómo iba cambiando en un año.

Aquí una selección de lo que, creo, es un reencuentro conmigo misma.



Coqueteando con...



Histeriqueando por...



Pensando en (ejem, probablemente nada, jeje).



Peleando.



Intentando endulzarme la existencia (sin éxito, obvio).



Ejem, sí... peleando de nuevo.




Mmmm...dramatizando (que la neta me sale rebien... diiiicen).



Adolescenteando (o el continuo intento de mi cuerpo por volver a ser lo que fue y sin lograrlo).



Puffff, con miedo, miedo, mucho miedo...




...sí, por eso bebo...



Y luego pienso... y pienso... y pienso...



Pero al final sólo quiero que se vea la mallita, que la vida ceda, que la emoción no cese, que cada vez y siempre, me reconozca yo en estas imágenes y en todas las que habrán de venir.

12/28/2010

Ventana sonora: compilaciones musicales y otras cosas




Te hice una ventana de 1x2. Puedes abrirla y cerrarla, asomarte para ver un poco, observar un rato, explorar. Tiene mapa y direcciones, significados millones y unas ganas irremediables de hacerte pasar.

Si la usas como puerta, podrás descubrir un mundo alterno: un universo de historias, de pasados instantáneos, de sentimientos y deseos que, si bien sale de mí, ha sido creado pensando en ti.

Puedes tomar un viaje rápido por sus carreteras melódicas u obsesionarte con lo que sus letras intentan decir. Puedes tomarlo entre tus manos y salir corriendo por lo que te hace sentir. Ése es el irrefrenable poder de un mixtape.

Espero esta ventana te transporte a un mundo que quieras conocer...

11/15/2010

El zoológico porno**



Jojo el león, bofo y viejo, gruñe sólo si ve un tentempié; Oz, el cocodrilo, sólo se mueve con el olor del músculo fresco, el perfume de los niños pequeños que lo ven en el cemento en el que reside; Rigo, el rinoceronte, ve con desinterés el movimiento de los hombres: el sol en el cielo y todo sereno, otro tiempo monótono en el zoológico.

Pero de noche es distinto. En el momento en el que viene Silvio, el dirigente felino del grupo de Insurgentes, todo se convierte: los pobres domicilios de hierro se vuelven sets de cine porno y los vecinos se reúnen y cogen con todo, por unos dedos, un pie o un exquisito ojo de delincuente, poli o infeliz civil, dependiendo de los muertos que se reporten en el sector.

El ofrecimiento de Silvio, desde el principio, fue sencillo: sexo violento en video por miembros frescos, recién recogidos del sitio del crimen.

Y desde ese remoto tiempo, los devotos bichos, golosos por los trozos de hombre que el jefe felino les presentó, se rindieron noche con noche y tuvieron sexo sucio en los videos del exitoso género que Silvio definió como homo porno feroz.

“Los filmes se venden bien en Tepito y si el zoológico requiere de un surtido superior de nutrientes, es un buen negocio”, dijo en ese entonces el felino.

Por un pene fresco, el cerdo Felipe se coge cruelmente con el tigre Milo; por un trozo de vientre, Oz finge potente eyección dentro de Rigo; y el rey Jojo se entretiene con su mediocre pito, por un ojo, un dedo o un pie: todo por querer enloquecidos su porción del exterminio.

Bien dice Silvio, no es ilícito un truque de este tipo, ellos cubren un deseo, los bichos cumplen con lo que les es pedido.

**Descubra las características del ejercicio ;).

Carta a un joven escritor



Tienes la frescura de los 21 y las lecturas de un devorador de universos; los conocimientos de un viejo y dientes de leche de un atractivo inquietante. Tienes el talento de Molière y las actitudes de un niño pequeño; un entusiasmo casi bobo, pero, al mismo tiempo, encantador. Tenerte cerca me provoca una risa estúpida, sonrojada, muy sandía, como la carcajada de Tablada; y a la vez un desasosiego profundo, muy cabrón, irremediable anuncio del temido ataque de ansiedad tan amigo mío desde los 15 años.

Me das una alegría extraña; me despiertas una añoranza por la novedad; una sed de beberme el mundo a tragos, que sólo tu juventud me puede dar. Lo sé, vas a decir que siete años no es tanto, que siempre has andado con chavas más grandes, que está increíble, que da igual. Y aunque tienes razón (siete años no es tanto) he vivido cosas que tú no podrías entender a tu edad. Y sé que piensas que te subestimo, por un prejuicio, pero no es en sí que tengas 21, es que hay cosas en la vida que te rompen, que te dejan mal.

Y no quiero lastimarte (eres así de luminoso como para aguantarme), pero sé que si seguimos por este camino, más temprano que tarde, sentirás la daga punzante del rechazo y no la podrás olvidar. No quiero cargar con eso, no quiero que esto termine mal.

Tú mereces amores épicos, llenos de escenas literarias, de misteriosos encuentros en una calle del Centro, de noches interminables vagabundeando por la ciudad. Amores intensos, acelerados, de ligeros arcoiris e infinito brillo; romances que piensas infinitos, con un futuro expansivo, capaz de todo eso y más.

Y yo ya estoy traqueteada, pisoteada y sin un gramo de confianza. Yo busco cosas prácticas, sencillas, desilusionadas de sí mismas, de fácil digestión, sin muchas calorías. Cosas que no me pidan mucho, que no me aceleren el corazón demasiado, que no me quiten tiempo, cosas desechables que no humedezcan mis ojos, que no me exalten ni me hagan sentir viva de más.

No, no quiero que te alejes, me causas adicción, me iluminas los días, de un modo muy especial. Sólo quiero que entiendas, que es mejor ser amigos, dejarlo en ese lindo sentimiento, en una dimensión puramente platónica, de tácito acuerdo. Porque tu corazón no aguantará mi dureza y tus felices balas terminarán por desangrarme y haremos literatura, sí, pero de corte lacerante, amarga, dolida, autodestructiva. Y desaparecerás de mi vida, me guardarás rencor, perderemos del todo la luz de esta alegría tan inocente y grata que nos da la compañía; y no podré con la culpa, pues de antemano sé que no funcionará, que será de lo peor. No dejemos que eso ocurra. Quizá con el tiempo las cosas cambien, ya se verá… pero hasta entonces, espero puedas conformarte con esta idílica amistad.

11/05/2010

8760 horas

50 botellas de vino
65 libros
2 electrodomésticos
3 obritas de teatro
Eternidades frente a la ventana.

300 cajetillas de cigarros
4 cómplices de cama
10 mil kilómetros
5 plantas nuevas
Incontables horas de televisión.

1 soleada tarde de motel
27 fracasos
1 taxista tartamudo
2 distanciamientos
Silencios eternos.

7 cuentos
310 manzanas
10 nuevos amigos
1 tatuaje
Chingos de momentos incómodos.

8 éxitos
6 conciertos
1 exhibicionista
40 películas
Infinitos mates.

3 pares de zapatos
1 amor platónico
8 destinos
10 437 tuits
Sinnúmero de texturas.

65 besos
14 nuevas obsesiones musicales
4 plantas muertas
11 cajas de tinte
Desmedidas dosis de estrés.

4 poemas
3 libretas
52 descubrimientos
1 mundial
Estados interminables.

3 ilusiones perdidas
56 posts
2 tallas
1 reencuentro
Extensas caminatas.

4 guiones
7 pesadillas
1 computadora
31 paletas payaso
Incontables peleas.

11 400 mails
25 fiestas
93 intentos
1 año de hablar conmigo misma
Inexplicablemente entera.

10/20/2010




Sé que sabes que hace rato te hablaba a ti. Sé que sabes que hace más rato me refería a él. Sé que te dio gusto, aunque harás caso omiso.

También sé que lo nuestro no puede ser. Y no quiero que sea, porque cada vez que es todo se va a la mierda.

Sé que, aunque no te lo aceptes a ti mismo, te gustaría que fuera. Sé que me piensas en las madrugadas y que hay mañanas que abres el ojo temprano y te llego de golpe a la cabeza porque sabes que estoy despierta.

Sé que me lees, a pesar de que me hagas creer que no conoces mis letras. Y sé que ese disco no es mío contigo, sino de la distancia que nos hizo recrearnos mutuamente en la cabeza.

También sé que se corrompió todo, que nada puede ya hacerse, que la oportunidad pasó y no seré capaz de recoger lo que deseché ya con tanta certeza. Pero sé que cada día te preguntas cómo hubiera sido... ¡El maldito "hubiera"!

Y, ¿te digo algo? A mí también me atormenta esa idea: lo que podría haber sido si quisieras.

Pero también sé que si todo se fue a la mierda fue porque no puedes manejar nuestro "hubiera"; que mi posibilidad en tu vida pesa y que no habrás de querer explorarlo, aunque existiera forma aún de rescatar lo que dejamos pasar, cual si fuera una aventura más.

10/18/2010

Llorar las horas





Ayer, sin razón aparente, me solté a llorar justo cuando me acosté en la cama. Llorar las horas, Analía; llorar las horas, me decía.

Terrible contradicción ésta: todo el tiempo tengo prisa; me hace falta tiempo, todo el tiempo. Pero a veces, como ayer, como algunos otros días, quisiera que las horas se me fueran de las manos líquidas. Llorarlas todas, llegar al viernes con velocidad acuática, terminarme las semanas en lágrimas, alcanzar diciembre rápidamente por medio de mi llanto; dejar salir eso que oprime mi pecho, que no localizo, que no entiendo; dejar que se escape de mí como huye, ágil, el agua de las manos.

10/12/2010

Justo así...

Ventanas


(Robert Delaunay)

Jugaba a deshacer conjuros
se perdía
veía volar ballenas
nubes ola
sentía un viento de hadas
imbuirla
en elástico otoño de mariposas amarillas.

10/09/2010

Bits and pieces





Pedacería: pensamientos inconexos que buscan conexión.

*¿Quieres enamorar, atrapar, seducir, humillar al ser amado?

*No confío en mí.

*I don't do journalists.

*Tu retorcimiento adolescente es meritorio de un solo adjetivo: soporífero.

*¿Esto es la envidia?

*Alguien ha secuestrado a la belleza, ¿quién se anima a rescatarla?

*Hablo en presente, pues el presente es lo único que se vive.

*El constante recordatorio de lo que pudo haber sido y no fue.

*I don't do photographers.

*"No lo digo yo, lo dicen ellos. Del 50 al 60 creí en este país, después no hubo nada que hacerle.", Alfonso, 72, taxista.

*El aullido solitario y la borla desestresante.

*"La ocasión hay que creearla, no esperar a que llegue."

*¿Navidad en octubre? No me digas...

*Lamento que no te des cuenta de que sirvo para más que una cogida.

*Keep calm, and carry on.

*Un viento cuento de hadas sopla en mi ventana.

*La princesa no estaba interesada ya en que la rescatara un príncipe.

*Yes, I know he's fictional.

*No sé cómo deshacerme de este sabor a pasado.

*No quiero ser antigua.

*Tentada a pedirte repitamos el encuentro.

*Prisionera del tiempo.

*"Todo esfuerzo literario es evocación del pasado. Aun cuando se procura atrapar el vuelo del presente, hay siempre un elemento que va más rápido que nuestra pluma: el tiempo."

*Tarde a todas partes.

*Los pajaritos están casi tan alborotados como si fuera primavera.

*¿Qué pasaría si siempre fueran las 5 de la tarde?

*No confío en nadie.

*¿Podrías por favor comportarte como un tipo de tu edad?


*I don't do assholes.

*Me molesta el nuevo iTunes.

*Señoritas en baby doll en el mercado.

*La hortensia de la abuela.

*Not anymore.

*Casta y pura hasta la sepultura.

*No sé.

*¿Te asusto, te intimido o simplemente no ves eso en mí?

*¿Cómo gritar sin A?

*Ellos somos todos.

*Tiempo elástico agrega 12 horas al día.

*Otoño mariposa no vueles hacia mí como Mauricio Babilonia.

*You gotta stand up straight, carry your own weight, these tears are going nowhere, baby...

*"La concepción de 'sabiduría' como un viaje hacia la 'ignorancia' original: como el esfuerzo indispensable de merecerla."

*Podría haberme enamorado, pero me fue imposible al ver tu esencia hueca.

*Diga lo que diga de mí, me encanta Fading Like a Flower.

*Recuperar el sueño perdido.

*La constante persecución de lo que ya se ha ido.

*El mate de la tarde como remedio para la distracción.

*La descomposición de nuestro vil amorío.

*"En islas de monólogos sin eco".

*Ausente de ti y de mí.

*Forever is a long, long time when you've lost your way...

9/08/2010

Random Thoughts




Todavía te siento: como un hoyo que me atraviesa el pecho.

Prisionera.

A veces podría jurar que estoy muerta por dentro.

Últimamente siento con el cerebro.

A veces hay que llorar a lágrima pelada.

No quiero dejarlos entrar a ésa parte de mí.

Leeré esto y no sabré a quién o qué me refería.

Y tú que me lastimaste tanto ya ni te acuerdas de mí.

Sí, generalizo y tengo prejuicios.

Aparentemente, lo mío es de suerte, todo lo he construido, por lo visto, a base de suerte.

Otra vez pensando en optar por el huerto.

Un hoyo en vez de ombligo.

Mentiras malhechas.

Mi idiotez me sigue sorprendiendo.

Mi inmadurez me sigue soprendiendo.

Era tan tonta a los 22. Soy tan tonta a los 28.

Burlarme de mí misma está resultando efectivo.

Me arden los ojos de llorar, pero quiero seguir llorando.

Subir. Bajar. Subir. Bajar. Subir. Bajar.

Vicio de carácter: la tragedia.

Todo está demasiado conectado.

Desde que supe que eras un fantasma dejé de quererte.

Es como si estuviera, todo el tiempo, ausente de mí misma.

Sé exactamente lo que quieres hacer.

17 pasos a la derecha. 2 kilómetros atrás.

Rotundo desapego.

Gigantesca, Mediocridad se precibitaba hacia ella con paso acelerado.

Todo parecía indicar que la atraparía.

No soy más hija de puta. Sólo he aprendido un par de cosas.

A punto de tronar, casi tronando.

Tendremos que fabricar otra ventana.

Soportaba todo menos que le mintieran.

Intento huir de mi sombra, pero ella me sigue a todos lados.

7/31/2010

Si cierro los ojos




Hoy me di cuenta de que tengo superpoderes. Sin importar dónde esté, si cierro los ojos y escucho esa canción revivo eso que sentí alguna vez, idéntico, intacto y, por esos cuatro minutos y algo, te amo de nuevo.

Sé que si cierro los ojos y los aprieto un poco me puedo teletransportar, alargar el tiempo, viajar en él y visitar cualquier dimensión que yo desee. Con tan sólo cerrarlos puedo ser yo y puedo ser otra; puedo ser tuya, suya, o de alguien más; puedo revivir esa tarde de parques y motel, habitar esa escena en el metro, repetirla, cambiar sus personajes, su estructura...

Si cierro los ojos y presto atención a esa burbuja en mi pecho puedo ir a donde quiera, puedo brincar al futuro y encontrarme vieja; puedo volver a ese estacionamiento tan usado;imaginarme con él o pensarme con un extraño.

Por si esto fuera poco, he adquirido la habilidad de predecir mi futuro inmediato y, a veces, si cierro los ojos y me quedo callando, puedo incluso prever las palabras que habrán de ser nombradas, los gestos, las idas y las vueltas.

Pero lo mejor de mis superpoderes es que, cierre o no los ojos, en este momento se siente genial ser yo.

7/27/2010

Pequeñas eternidades**


Siento que estamos del otro lado del tiempo, en una dimensión en la que las horas ya no pasan. Aquí tú y yo somos dioses y creamos mundos por medio de palabras.

Estamos suspendidos en un instante eterno, en donde el tiempo es más largo y los segundos tan elásticos que pueden durar semanas. Flotamos en este sitio donde, como en Luvina, nadie lleva la cuenta de las horas ni a nadie le preocupa cómo van amontonándose los años.

En esta eternidad progenitora, tiempo cuasi mítico que se estira y expande, nuestra imaginación es la única creadora. Tú y yo estamos hablando y es lo único que existe, lo único que importa. Aquí los días comienzan y se acaban, pasan y pasan, sin moverse demasiado: alargan el tiempo, lo hacen plano.

Enunciamos creando una pequeña eternidad, un instante sin fin, que recordaremos una vez que, como siempre acontece, el amor se haya acabado y ya no deseemos nuestros cuerpos ni entendamos qué extraño magnetismo nos hizo reunirnos.

En este tiempo largo y suave, nos creamos el uno al otro, nos recreamos en mutuos ojos, somos, por ese breve espacio, quienes queremos ser y no quienes realmente somos. En esta eternidad creadora, en este impasse entre la nada y el inicio de todo, tus semanas de silencio saben a horas; mas cuando hablas la impaciencia del mundo me ataca, los segundos cotidianos me poseen, y deseo con cada centímetro de piel, que no calles, que sigas, hasta que al fin mi cuerpo se reconozca tuyo…

Pero sé que en cuanto esto pase, en cuanto el silencio no exista, el tiempo retomará su cauce, perderá su longitud y pausado fluir, para recobrar sus capacidades mecanizadas y así dictará, poco a poco, el fin de nuestra historia que aún no comienza.

La eternidad se escuchará lejana; el reloj persecutorio, nos devorará un poco en cada paso; seremos juguetes de su inevitabilidad y sólo tendremos la memoria como prueba de lo pasado. En nuestros recuerdos quedarán esos siglos de tiempos para inventar mares y cielos; esos instantes míticos en los que fuimos dioses de palabra e imaginación, esos segundos eternos en los que excitados nos creamos el uno al otro pensando que en esta ocasión no sería efímero y que viviríamos este pensarnos e inventarnos hasta el fin de los tiempos humanos.


**En una de mis clases tengo que entregar escritos con base en diferentes palabras cada semana. Éste resultó de "eternidad", que fue la palabra de la semana pasada.

7/08/2010

Guiños cósmicos



Últimamente tengo la impresión de que el universo quiere sintonizarse conmigo. Cada día una cósmica sorpresa, de esas literarias hechas de polvo de estrellas, espera en la calle o el celular que la encuentre, que la descubra, que la habite.

Con toda honestidad, aunque extremadamente estéticos, estos guiños cósmicos me tienen seriamente confundida. No sé qué busca decirme el universo con ese cúmulo de casualidades que mi naturaleza literaria tiende a entender como mensajes, señales que muestran los muchos caminos existentes.

Sí, esas gotas aladas que intentan despegar del piso después de sucumbir a la gravedad me traen muchos recuerdos; sí, sabía que me hablabas de nosotros cuando los ponías a ellos de ejemplo; sí, me di cuenta que tu sinfonía de color iba dedicada a mí y a mí solamente; sí, comprendí, cabalmente, que tu "broma" no era tal y que buscabas, con humor de msn, decirme que te intereso. Pero aclaro (a los recipientes de las afirmaciones anteriores) que no considero esa literatura cotidiana digna de ser llamada "guiño cósmico".

No, cuando digo que el universo me manda mensajes hablo de otra cosa. Hablo de pensarte y recibir tu mail aquel; hablo de que uses las palabras que nunca te dije para explicar tus inconsistencias; hablo, sencillamente, de nuestra extraña situación, de ese tan lejos, tan cerca.

El universo me pone en frente, literal, tu posibilidad. Sí, la tuya. Con guiños cósmicos, el cabrón hijo de puta, te descubre a unas cuadras o metros o centímetros; a un forward de distancia, un tuit o un mensaje, sea cual sea TU caso.

¿Confundido? Yo también. El universo te puso a ti, lo puso a él y a él y a él también, en mis narices y, por lo tanto, no entiendo lo que quiere decirme, no sé lo que hacer.

Si tú, sí TÚ, consideras que esta botella al mar te habla a ti, por favor ayúdame a entender el camino que TÚ quieres que tome. Esto no quiere decir, en lo absoluto, que al final me decida a seguir tus direcciones (como comprenderás, esto es cosa de pensarse), sería más una cuestión de servicio cósmico, al universo, a su comunidad, una especie de caridad fácil de realizar, cuestión de que, por una vez, te animaras a hablar con claridad.

Y si por casualidad el universo tiene un momento para darse a la tarea de leer esto, le propongo, señor, sea más preciso en las señales porque no quiero romper el equilibrio y la armonía de sus planes. Y ya si anda piadoso, señor universo, agradecería no mandara todas las señales en un par de semanas, tanto estímulo, simplemente, me recarga, no me deja entender la fina literatura que pone en mi cara.

7/05/2010

Miscelánea

Creo que hace mucho, años ya, entré en una fuerte crisis de identidad. No estaba segura de lo que quería hacer con mi vida, sigo algo insegura, pero no igual. Hace unos años, la pregunta se plantó por primera vez en mi cabeza y hoy encuentra al fin respuesta: ¿qué quiero hacer de mi vida? Quiero escribirla completa.

No sólo mi vida, sino también la de otros que la tocan, incluso sin darse cuenta, sin existir realmente o existiendo sólo en mi cabeza. Sí, la literatura me ganó hace unos años y ahora al fin tuve el valor de perseguirla. Una vez más intento asirla, ahora regresando a la escuela, una vez más quiero que sea mía.

En otros trópicos, estoy hinchada de alegría por el futbol. Sí... el dios esférico ha tenido a bien darnos brillo, ahora que la Celeste está en semifinales del Mundial de futbol. Mucha gente dice que con trampa están ahí, a esa gente le digo que no entiende de futbol. El futbol tiene reglas, claras y mientras se cumplan (a mano en el área corresponde penal) no habrá trampa.

Me da un gusto inmenso que un país como Uruguay esté entre los 4 primeros, de entrada porque nadie lo esperaba, pero más porque siento que los muchachos, esta selección uruguaya, se lo han ganado a pulso, han dejado todo en la cancha y creo que eso a muchos les da envidia, porque la satisfacción no nace de que estén entre los cuatro primeros, sino de ese esfuerzo superior, de esa lucha continua, de ese no dejarse vencer por nada, de saber que el equipo lo ha dejado todo y lo que pase a partir de ahora es, como quien dice, un pilón, porque ya con esto, la gloria sabe y sabrá mucho tiempo.

Del país, de México, la verdad que hay demasiado que decir, pero confieso que me encuentro a dieta de los sucederes políticos y no quiero comentar demasiado al respecto, Sí, estoy cansada de la violencia, de la corrupción, de la injusticia, de que nuestras "instituciones" sirvan pa un carajo, de que la gente no se levante y diga basta, estoy drenada y por eso me puse a dieta de noticias, aunque esto no significa que dejamos de lado toda esperanza, no. Esto simplemente se trata de juntar nuevamente las fuerzas necesarias para hacer algo al respecto.

Sí, son muchas cosas, muchas, muchas... Y también hay cientos de #botellasalmar que esperan ser lanzadas, miles de mensajes que buscan salida, pero será otro día, cuando encuentren el cauce del río y salgan libres al océano. Mientras tanto, esperemos Uruguay siga haciendo que nos sintamos orgullosos, los uruguayos, los latinoamericanos, todos; esperemos la escuela sea todo lo que espero y más; esperemos el país no se caiga todo a pedazos en lo que dietamos y recuperamos las fuerzas... Sí, estamos en un momento en el que nos queda sólo esperar.

4/22/2010

A quien corresponda:




Ya, ¿no? Ya estuvo bueno de que los fantasmas se aparezcan en manada (sí, manada, porque la neta, banda, se comportan como animales).

Ya no sé qué hacer para comunicarme, ¿les hablo como si fueran chimpancés? ¿¿¿Ju ju jo jo ji ji ja??? Porque con palabras claras no parecen entender nada, ni escrito ni hablado, y NI QUÉ DECIR DEL LENGUAJE CORPORAL, dudes, ¿necesitan un álbum de estampitas con diagramas para entender cuando una está dispuesta a hacer la excepción?

Parece que se ponen de acuerdo, hijos de puta, todos me hablan el mismo día y ahora que me tiene sin cuidado lo que hagan o dejen de hacer con su culo, por qué no, resulta que a ustedes les gustaría darme en el mío.

Púdranse, honestamente están de mega hueva los tres, qué digo tres, los 5 (sí, ustedes, par de imbéciles están incluídos en el conteo de los dudes más idiotas del mundo).

1. Que te des color de que mejor si te quieres divertir 3 meses después y con urgencia me busques, segurito porque no está tu novia, me parece una cosa tristísima. Más aún porque finges que no te está pasando lo que sé que te está pasando (sí, güey, me gira la piedra y soy buena en estas cosas, duh).

Y tú... tú no mames, ¿tres años después quieres retomar lo que desde entonces se veía que no iba a llegar a ningún lugar? ¿Es en serio? Porque, digo, yo no estoy dispuesta a involucionar para quedarte al nivel, eh... te aviso... Y como hace tres años, tampoco me emociona la idea de acompañarte a tus tierras a conocer a tu familia, ¿cachai?

Y, tú... chale contigo. Neto, chale... O sea, no cambias, always the same shit. Supéralo, pero en serio, no con tapaderas baratas, lo que no fue, pos no fue, manito... Y deja de decirme palabritas tiernas, que en esta etapa ya es ridículo.

Evidentemente tenemos que dedicarle unas líneas a "por sus siglas en inglés", WTF??? Eres peor que el DF, ¿cómo esperas que llegue a donde quieres que llegue si tus letreros apuntan a todos lados a la vez? Neta, ¿qué esperas que piense? No, mejor aún ¿qué esperas que responda a tus debrayes? Son debrayes, dude, y para acabarla de cagar te duran dos horas... ¿Cómo puedo saber si hablas o no en serio? Porque mira, "por sus siglas en inglés", ya estuvo bueno de esta mamada de hacerme creer una cosa y luego voltearme la tortilla y simular que me aluciné toda.

¿Me entendés, pelotudo? Si no tienes los huevos está bien, pero no te hagas el fresco fingiendo que no me diste material para forjar esas ideas, eh... DO NOT FUCK WITH ME! Ya me cansé de este jueguito pendejo y si sigues como vas te voy a cagar a patadas, te lo anuncio desde ya.

AHORA, el gran final es para ti, sí tú, hijo de la chingada, que finges que no existo, no es mi puta culpa que no hayas entendido los límites del pedo, te los expliqué y parecías un tipo suficientemente inteligente como para comprender y lo suficientemente maduro como para no andarte con estas pendejaditas de secundaria.

Por su atención, gracias

3/26/2010

En busca de La Pasiva perdida**




Uruguay: futbol, mate, candombe, chivitos y, para mí, panchos. Desde la primera vez que viene a Montevideo a ver a mi familia, hace 25 años, tengo el fijo recuerdo de que parte de lo que definía al país de mis padres era un lugar que siempre visitábamos: La Pasiva.
No se trataba de una cervecería cualquiera, sino de un sitio emblemático que en más de un sentido hablaba de “lo uruguayo”. Sin importar el local del que se tratara –pues ahora existe hasta una sucursal en España– era visita obligada para los uruguayos que vivían en el exterior cada vez que regresaban a la patria y, desde luego, para los locales que siempre la daban como referencia de los mejores panchos de la ciudad. Se limpiaban las mesas tirando todo al piso (puchos de cigarro, servilletas, comida), los mozos eran “hostiles”, los panchos sublimes y la mostaza un regalo gastronómico sin igual y el secreto mejor guardado del Uruguay.
Nadie recuerda hace cuánto abrió la cervecería, sólo que en el año de 1960 era un bolichito con unas cuatro mesas de mármol con sillas de madera adentro y otras tantas afuera, en los arcos del lado derecho de la Plaza Independencia, viniendo desde 18 de julio. El local, se presume, es lo que hoy se conoce como el PlazaBar.com, y ofrecía, únicamente, cerveza y panchos, muy a la manera alemana, nada que ver con el menú con el que cuentan hoy en día en el que hay chivitos, minutas y hasta variedad de ensaladas.
En esta última visita, tras recibir muchas malas reseñas, no lograba encontrar lo que mis recuerdos, pensé, habían idealizado. Ya no se limpian las mesas tirando todo al piso (damos gracias por eso); los panchos me parecieron más bien malos, de pan duro y frío; los mozos, aburridos y especialmente silenciosos; y la mostaza… (vaya, no entendí por qué mi madre hacía tanto esfuerzo en robarla, si más bien no sabía a nada).
En busca de los panchos de mis recuerdos recorrí tres Pasivas antes de hallar lo que, para mí, en cierta medida, definía, sino al Uruguay, al menos a Montevideo. En la sucursal de la peatonal Sarandí, en la Ciudad Vieja, me reencontré con esos legendarios panchos de salchicha sabrosa, pan chicloso y mostaza con ligero picor. Ahí entre mozos de cabellos grises o cabezas calvas, con “malos modos” y gran velocidad en los pedidos; entre los gritos de las órdenes, con sabor a Canario Luna, y las Pilsen corriendo en la barra, me reencontré con eso que tanto hablaba y sigue hablando de este pequeño país del Sur.
La Pasiva, en general, ya no es lo que era, pero existen locales que conservan el sabor tan clásico y legendario de un boliche de cuarta en el que lo gourmet no importa, sino lo sabroso, en el que parte del encanto es que los mozos griten y te traten como igual o, incluso, como inferior; un lugar que habla de una forma de ser, de un país de cosas sencillas, directas y, en cierta medida, igualitarias.

**Esto fue pa mi curso ;)

3/19/2010

Mis recuerdos de Montevideo




Hace 18 años yo vivía en Uruguay. Montevideo, la ciudad; Plácido Ellauri, la calle. Ayer caminé hasta esa casa en la que pasé un año de mi vida. Ha estado muy cerca todo este tiempo, pero la verdad que no me había animado a ir a verla.

Mis recuerdos montevideanos me provocan sentimientos encontrados, bien dicen los Rolling, "Mixed Emotions"... Tenía que llorar muchas cosas que perdí y entender muchas cosas que viví antes de animarme a enfrentarlos.

No sabía el número, no lo recordaba, pero pensé que cuando la viera sabría qué casa era. Han pasado 18 años y está algo cambiada, me costó reconocerla, pero... No es para nada como la recordaba, de entrada, según yo, tenía el doble de tamaño.

La puerta del garage, la de madera (porque la reja es una adquisición de los inquilinos posteriores), la recuerdo inmensa; y la ventana, que se observa junto a la terracita, era la que correspondía a mi habitación, mi entrada al mundo, según yo.

En esa época me encantaba el disco de Juan Luis Guerra y su 4.40 que traía la de "Burbujas de Amor". Ésa no era mi canción favorita, a mí me gustaban "Como abeja al panal", "Carta de Amor" y "La Bilirrubina". En ese cuarto, las mañanas de los sábados jugaba a que era una mesera y me tocaba abrir el restaurante. Entonces "dejaba entrar el sol" (concepto infantil y cursi, pero que me sigue gustando) por ventana, ponía a Juan Luis Guerra y empezaba a cantar y "limpiar" de lo más campechana.

Ahora que lo escribí me dio un poco de pena... jajaja, pero era una niña, ustedes comprenderán. Bueno, ése es mi recuerdo más nítido de esa casa, después conservo otro, de cuando murió Freddy Mercury o cuando le hicieron uno de los primeros homenajes.

Mi madre, mi hermano y yo estábamos en la cocina cenando y viendo el show en la televisión (todos erámos refans del Mercury). Y debo decirles que mi recuerdo es como de una miniatura de personita sentada en una silla gigantesca que estaba enmedio de un inmenso salón. Básicamente, aunque no estaba tan chica, recuerdo que me impresionaba mucho el tamaño de esa cocina. El recuerdo del recuerdo, algunos dirían...

Teníamos un perro y una barbacoa. Mi hermano cargaba consigo su enorme colección de latas de cerveza y refresco, mi madre me ponía madreselva en el cuello, para espantar los pijos, antes de ir a la escuela...

En realidad no puedo asegurar la precisión o certeza de estas imágenes; no sé si son del todo verídicas, ni qué tanto se apeguen a lo que de verdad ocurrió, pero son mis recuerdos y me tienen sonriente, con la emoción a flor de piel al verlos tan claramente retados por la realidad, al saber que, al menos, por un instante, puedo volver a jugar a ser quitita, sentirme pequeñita y retar la percepción...

3/15/2010

Uffff

Iba a escribir algo de Buenos Aires. Iba a escribir algo de acá, pero estoy pensando en que quizá sea hora de dejar de escribir.

Nunca tuve un viaje tan accidentado en cuanto a mis "colaboraciones". Dicen que sí, luego ya con uno en el destino y trabajando, dicen que no... La verdad que esto le da a uno para pensar.

Le piden cosas, en todos lados, siempre sale trabajo y uno se siente afortunado, pero la fortuna dura poco cuando después no pagan, agarran el pie en vez de la mano y queda todo muy confuso.

Dan ganas de dejar de trabajar en esto. Dedicarse a una cosa completamente distinta, irse a recoger kiwis, plantar jitomates o hacer pasteles para vivir. ¿Por qué no lavar platos en Noruega o manejar un colectivo en Buenos Aires? ¿Por qué no dejar el cruel sueño de las letras?

Uno se prepara y trabaja como mula años. De nada sirve, al final, siempre te pasa todo Dios por encima y te tienes que quedar callado. Agachas la cabeza porque no queda otra opción. Sólo sabes hacer esto y hasta cierto punto te sientes afortunado de que puedes hacerlo, pero al final parece que vives en una realidad alterna.

Siempre es lo mismo en todos lados. A diario escuchas que la gente se deja de dedicar a esto por eso, porque la cuestión "periodística" es muy informal... Y ganas no me faltan de mandarlo todo a la mierda y a todos... Parece que no importa cuánto trabajes, cuánto te prepares, cuánto te esfuerces, siempre ocurre lo mismo... Quizá la vida me está queriendo mostrar el camino, aunque uno distinto al que me había planteado.

3/01/2010

En Sudamérica los hombres...




(Amigas, no es que las quiera privar, pero ninguna foto se acerca a lo que he visto en la calle... se me derriten los ojos!!!)

... PUFFF, PAU, GUAU!!!!
No sé qué voy a hacer. Voy por la rambla y cualquier hijo de vecino me parece no guapo, GUA-PÍ-SI-MO... Es como si los hombres aquí abajo estuvieran todos hechos lindos... El que es chaparro, está bien formado; el que es güero (que no me gustan güeros) tiene una mirada DI-VI-NA; el que es muy viejo para mí, está bien añejado; el que es muy joven para mí, tiene un futuro/presente demasiado prometedor... Y si me sigo me tengo que salir de la casa a tomar aire porque no aguanto el calor.

A las amigas que piensan: "Y qué mierdas estás esperando???", sólo queda contestar, "no son los únicos". Chica que pasa, se me desvían los ojos de lo guapas... Lindas piernas, linda cara, buen cuerpo... Parece que acá abajo puros buenos genes... Bueno, no...

No seré totalitaria, porque hay tipos también horrorosos, de esos que no estás segura si tienen un problema físico grave (como algún tipo de retraso) o simplemente fueron creados para no inspirar el deseo reproductivo.

Por si esto fuera poco, se la pasan sin camisa... ¿Saben lo que es estar viendo semidioses sin camisa a diario? Es como ir con hambre al supermercado :(.

Sí, los primeros días daba gracias del taco de ojo y ahora la verdad que me angustia demasiado. Porque además qué, ¿qué pasa cuando uno regresa a la realidad? Hay que decirlo, en México tengo más oportunidad que acá y ni así consigo nada (bueno, que me dejen de hablar, que me rechacen, que me digan que no soy su tipo, que me restrieguen otras viejas en la jeta, o peor, polly pockets, o sea, NADA bueno) y si a eso sumamos que cuando regrese voy a tener los estándares súper altos... Mejor voy pensando en lo que se sentirá meterme a un convento o me voy concentrando en los mágicos poderes del nopal... no me decido todavía...

2/28/2010

Siempre...

... me saca SONRISOTA!!!! (La canción, que el vídeo –acentuado a propósito– me da pena ajena)

Estamos...

...bajoneados?
Sí, con signo de interrogación... No sé... andamos muy claros con la vida, con lo que sentimos, con cómo y quiénes nos sentimos...Y de repente, de la nada, gancho al hígado, recordatorio de, en realidad, dónde estás parado... FATAL... No hay necesidad de señalar... mensaje enviado, no contestado y "redes sociales" (horripilante término) mostrando la verdad... Pufff, me hace falta otro poco de "felicidad" para dormir y nunca recordar :(

Pipipi... papapá... bueno, no todo está tan mal... la autoestima inb crescendo, algo bueno tenía que salir de todo esto... Y escucho y escucho y mi playlist, señores, es muy muy muy genial, jajaja

2/26/2010

Sandía feliz




Sí, no he podido desconectarme tanto como quisiera. Sí, me siento libre, pero en realidad estoy encadenada (tengo entregas, tareas, mails que contestar). Sí, no llevo ni una semana fuera, pero estoy que brinco de contenta.

Estoy tan acostumbrada a que la familia se reduce a mis padres y mis hermanos, que tengo algo atrofiado el concepto. Y estos días, sólo días, con los primos, las primas, el tío, las tías, como que ponen mucho las cosas en perspectiva.

Me siento cómoda, más allá, me siento contenta. Y no me siento de marte, para nada de marte, y me encanta, me encanta esto de sentirme cómoda en mi piel; alucinada con lo sencillo; tranquila con lo complejo. Es como si el estrés estuviera en otro lado, en otro hemisferio y por más que cosas pasen, porque pasan sin importar la distancia, yo estoy tranquila. Embrutecida, también, lo acepto, pero estoy, dentro de todo, tranquila.

Tengo muchísimo que escribir y lo escribiré. Tengo mucho que resolver y lo resolveré. Y caminaré por la rambla cuanto sea necesario y tomaré todo el mate que mi sistema aguante porque se siente bien ser yo en otro lado; ser yo y que nadie me mire raro. Es como si, poco a poco, las piezas tomaran lugar en el tablero, y entre ellas se encuentran México y Uruguay, tú, y tú también, y tú que nunca me lees. ¡Y claro, yo! Y se siente tan bien tenerlo claro, porque cómo aclara las cosas la distancia, al menos para mí.

Anoche, el místico sonido del tambor me habló al oído. Me hizo mover tímidamente la cadera, me hizo, simplemente, sentirme inmensamente contenta. Watermelon smile, fresca, grande y completamente natural :D

**Prometo usar la cámara a partir de mañana... upsss

2/21/2010

28


Cumplo 28, ¿poca cosa? A mí me obsesiona... Estas son las 28 cosas que me hacen desear guacarear por cambiar al temido número par... Pero no me amargo, eh, jajaja, contra el tiempo nada se puede hacer, así que nos dejamos fluir...

1. Ya nunca soy la escuincla.

2. Pero me siguen tratando como escuincla.

3. Estoy desilusionada del mundo y de la gente, pero sigo siendo "joven" y pienso que puedo hacer algo para cambiarlo (tiempo gastado al pedo, ¿no?).

4. Me veía en otro lado, no sé en cuál, pero en éste seguro no (¿en una exótica isla, acaso? Neeeeeeel, na más con título universitario, lo que nos lleva a...).

5. Sigo sin titularme... (And I'm not getting any younger)

6. La carne no es lo mismo, cae con menos gracia.(Sin mencionar la invasiva celulitis que con todo arrasa).

7. Estoy más amargada y soy menos divertida.

8. Antes pensaba que el mundo era una mierda, ahora lo sé.

9. No tengo el mismo empuje que antaño, más bien me siento siempre empujada a ir al baño.

10. No tengo la misma inteligencia (digamos, gentilmente, que soy lenta).

11. Chupo un chingo, pero antes de ponerme animada, me entra la ebria sentimental y suelto lágrima :S.

12. Me hace falta experimentar, pero comienza a verse ridículo.

13. Los achaques aumentan con los días y parece inevitable recurrir a las pastillas.

14. Not the same shit usar minifalda a esta edad, not the same shit (aunque la usamos igual, le guste a quien le guste, y le disguste a quien le disguste, jua jua).

15. Sólo recibo invitaciones para babyshowers y la mitad de mis cafés con amigas incluyen recesos por lactancia.

16. Los 30 están muy cerca y sigo en la pendeja (y sin ganas de ENCARAR!!!).

17. Como que ya es tiempo de hacerse adulto, pero no me da la gana.

18. Ya no eres un joven con un futuro prometedor, más bien eres el que "de joven" tenía un futuro prometedor.

19. Pero tampoco eres un viejo lobo de mar, sigues "empezando".

20. Debería entender ya qué pedo con los dudes, pero en eso sigo siendo una quinceañera desorientada (¿qué digo en eso, jajaja, también en todo lo demás).

21. Me salen un chingo de granos, pero ya no es normal.

22. Sale pelo donde antes no había, primera señal de que, como la abuela, tendré un tupido bigote antes de que me dé cuenta.

23. Ya no duermo igual, jajaja, por ejemplo hoy me desperté a las 6, cuando me fui a dormir a las 2 de la mañana.

24. Me queda muy poca inocencia que esparcir y la que tengo sólo puedo usarla en caso de emergencia (siento que siempre es caso de emergencia, básicamente, cargo una neurótica a cuestas).

25. La calentura es imperativo reproductivo, no una cuestión de placer o no placer.

26. Tengo unas ganas casi irresistibles de hacerme de una mascota, pero no soy lo suficientemente responsable como para tener a otro ser vivo a mi cargo.

27. You should've know better, but you don't.

28. Eres insoportable y te das cuenta, pero ya es demasiado tarde (aunque algún día encontraré alguien que me quiera por quien soy).


La buena noticia es que, dentro de los límites de esto, me siento completa y tranquila... me dejaré fluir y tendré que hacerme a la idea de que es hora de encarar la vida, de que hay que laburar, ganar plata y adentrarse en una segunda niñez consciente, en lugar de continuar con la primera mal llevada...

Tesituras y disgustos



No puedo más. Nada me contenta.

Me hablan para una entrevista de trabajo, voy y resulta que no están, no hay quién pueda entrevistarme. Horas perdidas, dinero perdido y ni una maldita llamada. La informalidad me sienta fatal. Dicen que intenseo con ello, nada me caga más que me llamen intensa con esa negativa connotación, si no te gusta, a otro lado, no voy a cambiar porque no soy sufi light o sufi descafeinada para ti, hazte a la idea.

Me sientan mal también las "suavecitas" como les llaman mis padres. Ésas que hablan como que son unas linduras y underneath son unas perras culeras. Me molesta que existan, pero más aún que me increpen y se hagan las que quieren "convivir". Primero te dicen intensa y luego resulta que muy suavenas vienen a poner su cara de moscas muertas.

Me molestan las polly pockets y que haya quien les dé cuerda. Señores, están de hueva, ya entendimos que los ven para arriba, que son padrísimas muñecas de juguete a la hora de coger, sólo no finjan que en serio les parecen interesantes y si sí, aléjense de mí, ¿no? Evidentemente no tenemos nada que compartir.

Me castra tener trabajo y no tener cabeza, ver las páginas y páginas y no tener ganas de leerlas, saber que el deadline se acerca y ni siquiera considerar la opción de empezar a trabajar los temas.

Al fin me voy, pero siendo honestos llevo sin estar aquí un rato.

Me deprime mi mediocridad. Los de una de las universidades que me aceptaron pa la maestría me siguen mandando cartas dos años después, ¿qué no ven señores que no me dan los logros y la labia pa conseguir una beca? No me lo puedo pagar, no tienen por qué recordármelo cada 3 meses. Rubia y loser hasta la médula... let me be.

Me angustia ver cómo no puedo hilar, no puedo pensar, no entiendo nada y se me agotó la creatividad. Sí, creo que ya me va a bajar, pero no sé en realidad porque mi ciclo anda de locura. Ahora, con mi suerte, seguro me empieza a bajar en el avión. Cólicos en el aire, that sounds like a fun experience!

Estoy emputada conmigo porque quería acabar mi mentada tesis antes de irme y ni siquiera fui capaz de terminar con mis impuestos. Una mierda, ¿no? Cómo es posible que con casi 28 años no sea capaz de titularme, me debería de dar pena. Me da, pa qué me hago pendeja.

Pero ya que estamos en el full disclosure, no me creo capaz de hacerlo. No veo cómo terminarla, creo que intelectualmente soy una discapacitada.

Sí, ando fuchi, pero más fuchi conmigo que con otra gente, nada personal, sólo que existir, en este punto, es un fastidio. Miles de mails sin contestar, siempre me quejo de eso de la gente y ahora lo estoy haciendo yo también, al final todos somos una mierda.
Ni ser coherente puedo, mejor aquí lo dejo... los tambores esperan... con un mate, espero...

2/17/2010

Día H

Llevo un día de mierda. De esos que a uno le gustaría borrar del historial por lo mucho que apestan. Hacienda logra, cada día, que se me arruine, al menos, una comida.

Tenía que pararme temprano porque tengo más de 200 páginas esperando ser corregidas antes del lunes, pero anoche me dio un insomnio espantoso, entre que mi cabeza ha estado a engorde, tengo una tos que me da pena (neta que pulgoso se queda súper corto comparado conmigo) y me preocupaba tener que ver a mi contador en la mañana, me pude dormir ya entrada la madrugada. Entonces cuando sonó el despertador, con este clima de miedo, pues me metí entre las cobijas más profundamente y me quedé jetona, no tenía la energía para enfrentarme al pedo.

Desperté 15 minutos antes de tener que estar con mi hermana. La llamé, cancelé, y me quedé otro rato acostada. Para cuando me levanté ya me tenía que ir a ver al contador.

Setting: rubia moja peatones, frío, sueño, molestia hacendaria. Detesto ver al contador; el tipo es adorable, el problema son los impuestos. Entonces voy y me rectifica que tendré que pagar una millonada de impuestos por diciembre pasado. ¿Ando con dos pesos en la bolsa y Hacienda amenazando con quitármelos? No, no me jodan... Pero pus sí te joden, porque estás cagado de miedo de que te agarren sin pagar tus impuestos. Ya saben, las leyendas urbanas de que buscan a los que andamos en la clase "mierda" y los persiguen si deben unos pesos, mientras que a las empresotas no hay pedo, ¿no?

Bueno, tras dicha ojetez, hubo ojetez situacional que ni quiero mencionar (pero habrá que tomarla en cuenta en el recuento de los daños) y para acabarla de cagar se me atora un maldito disco de los huevos en la lap. Mi pobre maquinita no podía sacarlo... pinche discohijodeputa había que exocisarlo. Tras tener que reiniciarla varias veces, y perder un codiciadísimo archivo que estaba bajando,lo saqué con ayuda de mi RFC (¿pueden creelo?). Necesitaba sacarlo porque me malviajaba el sonido de la máquina, había que deshacerse de él, era radioactivo.

Mejora mi humor, hablo de chocolate, sonrío, sí genial, me repito constantemente (no pienses en los impuestos, no pienses en los impuestos).

Entonces me animo y cumplo con mi deber hacendario: pago la millonada en internet viendo mis pesitos evaporarse, le busco las fechas de los depósitos al contador y busco una factura que me faltaba. Respiro, mando.

RING RING, llama mi contador para decirme que necesita un montonal de datos por la joda del 16%, entonces, además de todos los pendientes que ya tenía agendados, tengo que acordarme de llamar y pedir los números mañana en horario de oficina... Pero la cosa no para ahí. Después me dice que hay un pedo con la factura del seguro de mi carro. El pedo es que el carro ya no es mío, es de mis papás, entonces la factura salió a mi nombre y me la dieron, pero no lo pagué yo, entonces no sirve, entonces ya me jodí no la puedo deducir. (Se imaginan la desesperación de la cosa, ¿no?).

Para completar mi pesadilla, digna de una historia de terror que sólo podría ser creada por Hacienda, me dice que hay un problema con la factura del internet. Tengo Cablevisión y pago anual, pero resulta que la mierda que me mandan no es la factura, entonces mañana tengo que ir a Cablevisión en algún punto entre el "parito" de ir a la UNAM por prestarle un recibo de honorarios a una chava hace unos meses, y el hecho de que tengo que ir a dejar un recibo a Polanco dos horas después –porque obvio sólo lo reciben una vez a la semana de 2 a 4. Y después, tengo Coyoacán y de regreso en menos de 2 horas (aunque eso no es culpa de Hacienda).

Entonces, en el infiernillo creado por estos cabrones, aunque uno intente el zen, está difícil no dejarse llevar por la ira con que esos ojetes de los huevos nos meten el palo mes con mes.

Me indigna... no continuaré... jajajaja, reír o llorar, señoras y señores, reír o llorar. Ciertamente, malcopear...

2/09/2010

Y que se me arruina el pastel de chocolate




Uno es prolífico cuando la pasa medio mal, ¿no? ¿Se nota? El “enmimismamiento” le digo… porque de entrada uno anda muy clavado en uno y pa salir sólo se puede clavarse en uno. El secreto está en saber en qué parte clavarse.

Bueno, ¡basta con la metáfora de clavos! He descubierto algo súper importante que quiero comunicar urgentemente para que, los que puedan, no sigan mis pasos.

Andaba confundida, ¿no? La neblina, los estímulos, tanta madre sonando alrededor di’uno, el ruido, señoras y señores, ¡el maldito ruido! Uno adentro de la pastelería, tantas opciones, incluida la gelatina, tanto que escoger, ¡tan complicado!

Pues, la cosa es que me desconfundí. Tomé los estímulos, las emociones, las preguntas, las respuestas, la información relevante, la irrelevante, los sueños, las ideas, los descubrimientos, TODO, vaya, TODO y, para variar, en lugar de meter todo a la licuadora, me senté a meterlo en carpetas y cajones.

Fue una sentada veloz, andábamos con prisa, pero bajo presión luego salen bien las cosas, al menos bien para las circunstancias, ¿no? ¿En qué estaba?

Ah, sí, bueno, el caso es que me desconfundí. Ya no estoy NADA confundida ni un ápice y, amigos queridos todos, eso es peor. En la medida de lo posible, consérvense confundidos y bien servidos, porque nada más entra la sobriendad y el ánimo clasificador, la cosa se pone realmente pesada.

¡Claro! ¿Cómo no me di cuenta de esto en la angustia de mi confusión? Confundida podía evadir, negar, fingir... Así, con la certeza de que sé qué es lo que quiero (que no es confuso, pero sí no sigue una lógica propia de mí)... aunque más tranquila, creo que soy un poco más miserable. Bien lo dicen por ahí, gente, ignorance is bliss!

En la medida de lo posible, si quieren ser felices y libres, si gustan de perderse en la pastelería y hacerse pendejos un rato, jajaja, por favor, sigan el consejo y no se desconfundan... Si lo hacen, verán que más temprano que tarde le pierden el gusto al olor del chocolate.

2/08/2010

Tic Tac



Hace unas semanas encontré en el bolsillo de una chamarra que hace mucho no me ponía, una cajita de tic tac.

La neta, nunca he sido muy fan de esas pastillas. Como que no siento que te refresquen el aliento sino todo lo contrario. Te dejan una sensación pastosa bastante desagradable, ¿no? ¿O soy yo?

Bueno, el caso es que las encontré mientras caminaba hacia la tiendita y me metí unas al hocico, en un impulso por seguir las normas fílmicas de la existencia de uno, es decir, en un intento de protagonizar una escena de comercial.

En principio no me resultaron desagradables. Aunque efectivamente no me refrescaron el aliento, como que sí me gustó esa onda de hierbabuena dulce dulce, además de que al fin comprendí el porqué de que no te ayuden a refrescar el aliento: es como las Sabritas, así no puedes comer solo una.

Bueno, fuera del asunto de la cata, lo que más me latió es que cuando iba caminando era como si trajera una maraca en la cadera, ¿no? Buenísimo, ¡caminata con theme music integrada!

Obvio me atasqué las pastillas a las pocas horas, en un impulso por saciar los rezagos de mi etapa oral, pero el sonido, en cierta medida, todavía me acompañaba. Como les pasa a los veteranos de guerra que les da el phantom limb, así clarito escuchaba el paquete cuando caminaba.

Hoy que recorrí mi ruta regular, en el automatismo que sólo puede darte caminar en chinga con la música a todo lo que da, me di cuenta de que el que me acompaña es otro tic tac, el del reloj.

La transición está a punto de terminar. Estoy a nada del final... Tantas cosas, tan poco tiempo y este asunto de que la vida no se detiene.

Es cabrona, la verdad, no para por nada, no hay tratos, no hay circunstancias atenuantes, ni madres. No importa dónde ni cómo estés, la cosa es que sigue y sigue como el maldito conejito duracell (bendito en ocasiones, en otras tantas tan inútil –sí, sí, me proyecto–).

Así que mucho para hacer, poco tiempo, cabeza nula. No le pido a Concentrancia porque es una cabrona, ya vimos... Pero le pido... mmm, le pido... Le pido a Literatura, a los santísimos Reyes Magos, al elocuente Brian Griffin, al más malévolo de todos (Stewie), a Ren, a Stimpy, a Chavela, a Batis, a Kenny, a Cartman, a Morrissey, a Jarvis, a Proust y mis amigos vino, whisky, tequila, que unan sus fuerzas a la manera de los gemelos fantásticos y me den la paz necesaria para dormir y no andarme mareando yo solita; la capacidad para manejar bien mi tiempo; y, lo más importante, la fuerza para mantenerme "bella" en el proceso, jajajajajajajajaja... Gracias, señoras y señores, mal chiste, pero para variar, aunque confundidos y neuróticos, andamos de buenas (clap, clap, clap)!!!

Concentrancia... II

Me las vas a pagar... en lugar de concentrancia me diste un insomnio que me ha puesto la cabeza a girar... ¿Y ahora qué? ¿Qué toca? ¿Manicomio? Porque parece, eh...

¡¡¡Reniego de ti!!! ¡Maldita! Ahora estoy sobrerrevolucionada, confundida, extrañada y ensoñada y NADA DE CONCENTRADA...

Me vengaré de ti, aunque sea lo último que haga... lo último que haga, ñaca ñaca...

Concentrancia...

... querida, hagamos un trato... Tú te das una vuelta por mis rumbos, me permites concentrarme, unas tres horas... no pido más... Y yo, a cambio, prometo dedicarlas al trabajo remunerado y no a los proyectos pro bono, ¿va?

Mira, Concentrancia, la cosa es muy sencilla. Si no trabajo, no gano dinero, si no gano dinero, no me alimento y entonces... imagínate... ¿Qué sería yo sin dinero para alcohol? ¿Qué sería yo sin techo, sin certezas? Porque, Concentrancia, estimada Concentrancia, hasta el momento lo único certero son las necesidades básicas y sin ti, ya ni eso... Anda, guapa, no me desquicies tanto...

Haremos el siguiente trato. Yo me voy a dormir con Proust. Y mañana a las 5 me levantas... me levantas del entre el sueño de los distraídos e incapacitados emocionales y me traes a tierra para terminar mis labores, ¿te gusta?

Anda... aaaaandaaaaaaa.... di que sí... plis plis...

2/07/2010

Cartoonland miusik taim

Esos momentos imborrables que me alegran la vida... Del Happy Happy Joy Joy al The Bird is the Word...

Link: Ren And Stimpy-Happy Happy Joy Joy





2/01/2010

La tartaleta mental


¿Alguna vez les ha pasado que se confunden? Ahora, ¿alguna vez les ha pasado que sienten que su cabeza les pone trampas? ¿Alguna vez se han confundido por un sueño?

Hace muchísimos años, bueno, no tantos, pero cuando estaba en la facultad, yo tenía un novio (tipo lamentable, debo mencionar) y un día ¡chínguele!, que sueño con otro cabrón. Se trataba de un compañerito mío que tenía pinta de hombre misterioso y acabó siendo, como ocurre con muchos "intelectuales" "enigmáticos", un verdadero pelmazo. Pero eso está fuera de punto también, el caso es que soñe con él. En mi sueño no ocurría nada triple X (en ese punto aún era bastante inocente, jeje), sólo nos dimos la mano y después un beso. Pero, ¡qué beso, señoras y señores!

Al día siguiente me sentí culpable. Me sentía mal con mi novio, porque sentía que le había puesto el cuerno, y rarísima con respecto al mencionado compañerito de la escuela. Me ponía nerviosa nada más de pensar que podría aparecerse. Y cuando lo hacía, su presencia venía acompañada por fuertes sonrojes de mi parte, sudor y mucha pena. Nunca pasó nada con el fulano y el novio me despachó unos meses después (no es por eso que pienso que era lamentable, es que lo era, en verdad).

Bueno, la cosa es que en las últimas dos semanas he estado soñando con varias personas. Algunas me han puesto nerviosa, otras enojada, otras conflictuada, pero lo que más, me han confundido brutal.

He tomado decisiones fuertes por estos sueños; fuertes como cerrar ciertas puertas, con varios cerrojos y candados; fuertes como repensar la forma en la que veo a los otros; en fin, fuertes y ya...

Pero hay momentos en los que los sueños, esos raros y confusos, se tornan déjà vu y entonces, mis queridos todos, sí estamos en problemas.

Volvemos a: ¿alguna vez se han sentido confundidos por un sueño? ¿Alguna vez les ha costado diferenciar lo soñado de lo que está pasando? Ahí la cosa no es una omelet, ¿ven? Es una cosa de fino entramado, una tarta de cereza, algo delicado.

Aquí las capas se distinguen a la perfección, pero es inconcebible que existan por separado. El secreto está en diferenciarlas lo suficiente como para no permanecer confundido mucho rato. Claro, eso me lo digo en voz alta y todo el pedo, pero a la hora de la hora, a ver quién es el buenazo que las distingue por completo.

El estado tartaleta es durísimo en más de un sentido. No sólo los hace concentrarnos en lo que quizá no deberíamos de concentrarnos, no sólo nos hace confundir el ser de las cosas (si las cerezas pueden existir de otra forma que no sea con la tarta, que la tarta antes fue masa, que.. etc. etc.), sino que además tiene el poder de dejarte sin habla.

Por más que intentes articular lo que sucede, la tartaleta de lo impide y te llena la boca de migajas que te hacen imposible tener claridad lingüística. Otro problema de la tartaleta es que, a diferencia de la omelet, es un estado más prolongado, en el que se analizan las cosas de cerca, se repiensan, un profundo y temible estado de Pepe Grillo Interior.

If you know what I mean, por fa no sean gachos pasen la receta pa salir de aquí. If you don't know what I mean, la que les espera el día que su cabeza les juegue la pasada de ponerles trampas, estén dormidos o despiertos.

Lo siento, pero sigo pensando que lo mejor es destruir a tu Pepe Grillo Interior, masacrarlo, cortarlos en trocitos, molerlo como carne picada... Porque a mí se me hace que ese hijo de la chingada también es un misoginillo y es él, y sólo él, el que genera el estado tartaleta... Sabe bien lo difícil que es resistirse a analizar tan delicado postre... qué digo a analizar, ¡a acabar con él! Jajajaja

1/29/2010

Hoy... hoy... hoy y siempre

No pido que recuerdes, no hay conmemoración posible... sólo no olvides las narices de payaso y los globos aerostáticos. Están ahí por algo y no deben perderse en este abismo vano.

1/25/2010

Y dale y dale con la foto

Estoy enojada. ¿Qué raro, no? Pero es que, en verdad, la gente deja muchísimo que desear. Están todos con lo de Cabañas. Pobre, la neta a nadie le deseo un balazo en la cabeza (bueno, sí a un par que se lo tendrían bien merecido) y, evidentemente, tampoco le deseo a nadie que le tomen una fotografía herido y después la suban a la red. Sin embargo, la molestia por la fotografía, morbosa o no, es lo que me tiene encabronada, no el hecho de que los medios le hayan dado difusión.

A ver, están todos muy indignados porque suben la foto del cuate con la bala en la cabeza y arman tremendo pancho cuando por lo que, creo yo, deberían de estar enojados es por la violencia en el país.

¿Rudeza innecesaria la de subir la foto? Puede ser, puede que esa imagen no informe más y por lo tanto se trate de algo morboso. ¿Pero es rudeza innecesaria porque es un futbolista o porque la foto es muy violenta? Yo no veo que la banda la arme de jamón por todas las fotos de narcos muertos que hemos visto desde que entró Calderón al poder. ¿Qué? ¿A poco porque son narcos no tienen dignidad también? ¿Ellos no son personas? ¿No tienen madres, tías, primas, hijas, hijos, padres, hermanos, que pueden ver la foto y sentirse indignados? ¿A poco porque son narcos no les parece violenta la imagen de cuerpos muertos, destruídos por las balas, mutilados o degollados?

¿No deberíamos estar molestos porque ésa es nuestra realidad? Porque la foto sólo está retratando lo ocurrido, ¿o no?

Me fastidia que además haya gente hablando de si es correcto, inmoral, ético subir las fotos a los medios, pero sólo hablan de la foto del futbolista, jamás de las fotos de mujeres violadas, asesinadas, de hombres degollados, baleados, de cuerpos en cajuelas... ¿Qué, eso no les parece morboso también?

Para mí es un tema muy complejo, pero no por Cabañas, sino por todos. ¿A poco hay que cambiar los estándares sólo porque se trata de alguien famoso? ¿Debemos reportear distinto porque es un futbolista del América y no un "delincuente" o un "perdido" o simplemente porque no es pobre?

Ya una amiga me había dicho que qué onda con las sangrientas fotos de la guerra contra el narco que publica luego Reforma. Ella le mandó una carta al director para decirle que desayuna con el periódico y que guácala andar viendo eso. Sí, pero qué se supone que debe hacer un medio, ¿no mostrar las imágenes que la realidad le está dando? ¿No reportear las cosas "feítas" del mundo? ¿Sólo poner las notas lindas?

Porque no es un fotomontaje para ilustrar algo. No se trata de un diseño, se trata de un hecho que fue retratado por un reportero gráfico. Se vale sacar imágenes de niños mutilados en Sudán, de gente entre los escombros en Haití ¿pero no se vale si se trata de un futbolista?

Ojo, no digo que lo tenga claro. No sé dónde está la línea y me cuesta trabajo ver claramente qué es lo correcto y ético en estos casos. Sin embargo, en verdad me parece hipócrita que ahora se indignen todos porque se trata de alguien famoso. Creo que deberían de repensar las cosas y ver también que si la realidad no cambia está cabrón que los medios reporten otra cosa. Si no quieren ver muertos, probablemente lo mejor sería pensar en cómo detener las muertes, no en si los medios sacan o no las fotos de la bonita realidad que nos rodea.

1/19/2010

Retomando a Massive




Por suerte, no estaré cuando vengan...

1/14/2010

En la cama con Proust




Simbólicamente, a manera de representación o de respuesta a esta temporada de tanta búsqueda en mi vida, el primero de enero empecé a leer En busca del tiempo perdido.

Las primeras diez páginas me costaron muchísimo trabajo. Carecía de la concentración necesaria para seguir la historia del recuerdo, del pensamiento, de la evocación. Me obligué, lo acepto. Me obligué a seguir leyendo porque dije que leería ese libro empezando el año. Y la obligación, por primera vez, dio resultado.

Comparto uno de los párrafos que me hizo sentir que, la neta la neta, sí más Proust y menos prozak:

"En mí también se han deshecho muchas cosas que yo creí que durarían siempre, y se han alzado otras nuevas, preñadas de penas y alegrías nuevas que entonces no sabía prever, lo mismo que hoy me son difíciles de comprender muchas de las antiguas."

No sé si por el camino de Swann encuentre las respuestas que busco. Quisiera que las preguntas que me hago fueran tan fáciles de contestar como simplemente leer un libro. Sin embargo, creo que me espera un largo periodo de amar las preguntas y no buscar sus respuestas. Sin embargo, mantener el equilibrio es difícil, tantas preguntas lo hacen a uno cuestionar, incluso, lo que antes se tomaba completamente por sentado.

1/11/2010

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No te pido que recuerdes, sólo no te olvides...

1/08/2010

La paradoja de Diego Shoening




Si metiéramos a Diego Shoening a una gigantesca caja de cartón y le diéramos sólo unas navajas de afeitar como diversión, ¿se daría cuenta de que ya es hora de dejar el planeta o decidiría afeitarse y esperar a la foto para ver si logra entrar en una breve de la diaria?

La respuesta, en realidad, es completamente irrelevante, el destino de Diego Shoening me tiene muy sin cuidado, pero queda la cuestión fundamental y absoluta, ¿soportaríamos esperar a ver si se mató o no, o abriríamos la caja casi de inmediato para saber la respuesta?

Yo, que soy curiosilla por naturaleza, siempre, ante el dilema opto por el camino difícil. Ahora sí que, ante la duda, compra. Y por ende, bajo esta filosofía, uno persigue las respuestas, por peligrosa, sórdida o aburrida que llegue a ser esa persecusión y el posterior hallazgo de verdades indiscutibles, jaja.

Sin embargo, a veces, pareciera necesario esperar un poco a que la vida acomode las piezas, a que, sin nuestro continuo manoseo, el camino se desarrolle a sí mismo. Porque, a veces, y sólo a veces, hay momentos en los que por más que queramos no estamos capacitados o listos para entender las respuestas y obtenerlas sólo resulta más confuso.

Después de varias cajas abiertas. Después de muchas curiosidades saciadas, quedo con la sensación de que no me encuentro lista para todas las respuestas. Creo que bien podría aceptar que Diego Shoening se hiciera un daño irreversible dentro de la caja y apareciera muerto al momento de abrirla. Pero, ¿puedo aceptar que saque otro disco y se encuentre profundamente convencido de que volverá a ser lo que fue hace 30 años? Mmm, de eso ya no estoy TAN segura, jajaja, habrá que ver si aguanto o prefiero quedarme con la pregunta en la cabeza, what would Diego Shoening do?