9/28/2009

Soy narrativa



Soy crónica de largo aliento, narrativa por elección y por convencimiento. Busco contar cuentos, dar giros, anudar cabos sueltos, cerrar historias, plantear argumentos.

Soy mujer de novelas, de sagas y distancias, de páginas y páginas, de capítulos varios. Soy verbo imaginado, sustantivo preciso, adjetivo entregado; anécdota y escena; personaje y punto climático.

Soy letra erótica de puntuación intensa, alejada de romances estilísticos y versos enamorados. Soy carne viva de agitación y sentimiento, con un presente y un pasado, con un contexto bien ilustrado y un significado claro.

Soy todo menos poesía, tan breve, tan críptica, tan escurridiza. Mi idioma no entiende de tantas metáforas y alegorías, sin los argumentos propios de la narrativa.

Me gustaría saber apreciar las gracias del verso, la elegancia de la rima, lo exquisito sin contexto, pero no tengo la clase o el sustento. ¿O es que las aliteraciones de tu conducta poema, han cansado a mi oído de prosa periodiquera?

Por eso, como nota de diaria, cual efervescente relato, busco la conclusión a esta unión antinatura que habíamos comenzado. Porque, aunque mi historia de puesto, cruda y directa como la sangre y el sexo, con todo mi cuerpo te deseaba en carne y verso, ya me he dado cuenta de que no podré aprehender tu lengua métrica en mi piel de historias callejeras y que no llegará el momento de cerrar el relato que en mi cabeza he abierto, pues tu poesía no ha dejado cabos sueltos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

sopa crema? o digamos a Salvador Novo con cariño? Wakala! los poetas putos son lo peor!

Filiola dijo...

Touché!! La poesía se hace más con acciones que con palabras. El que es pura palabra no es poeta, es un farsante.

Bombón Insolente dijo...

No hay que ser irrespetuosos con la palabra, ¿no? Hay que hacerle tributo, entregarse a ella... de lo contrario es mejor mantener el pico callado y los dedos quietos.

:)